Familiares, amistades y colegas dieron el último adiós a la profesora Xochilt Guadalupe Toledo, quien falleció tras recibir una descarga eléctrica en el Hospital Departamental Alfonso Moncada Guillén de Ocotal, Nueva Segovia.
La docente, de 42 años de edad, acompañaba a su hija menor, quien estaba ingresada en la Clínica de Asegurados del hospital. En horas de la noche, salió brevemente para alimentar a unos gatos que suelen llegar al centro asistencial y, al ingresar a una zona restringida dentro del hospital, ocurrió la tragedia al rozar accidentalmente un cable de alta tensión, muriendo de forma inmediata.
A eso de las 12 del mediodía, su cuerpo fue llevado desde su casa de habitación, ubicada en el barrio Monseñor Madrigal, hacia la Iglesia Nuestra Señora de la Asunción, donde se ofició una misa en su memoria. Posteriormente, fue trasladada al Centro Educativo Gabriela Mistral, donde impartía clases de Tecnología, para recibir un homenaje por parte de estudiantes, docentes y personal administrativo.
Finalmente, fue llevada al cementerio municipal, donde la sepultaron entre lágrimas, oraciones y expresiones de cariño.
Como parte del homenaje, autoridades del Ministerio de Educación y de la comunidad educativa realizaron un minuto de silencio en las instalaciones del centro escolar donde laboró durante años. Este gesto fue acompañado por palabras de reconocimiento y gratitud hacia su compromiso con la enseñanza.
Durante el acto, el secretario político Lester Martínez reconoció la labor de la profesora Xochilt como una mujer solidaria, humanista y defensora de los animales.
“Desgraciadamente ocurren situaciones que no podemos controlar. Queremos enviarle un abrazo a toda la familia y recordamos a la compañera Xochilt como una maestra que educó a tantos jóvenes”, dijo Martínez.